2015/02/27

TRAS DETENCION DE LA TUTA, FUNCIONARIIOS DE GOBIERNO SERAN DETENIDOS EN MORELOS



En 2006 en Michoacán surgió el grupo criminal denominado “La Familia Michoacana” que de ser una organización local pasó a ser un cártel del crimen organizado a nivel inacional; sus principales líderes fueron José de Jesús Méndez Vargas, alias “El Chango” Méndez detenido el 21 de junio de 2011 y Nazario Moreno González, “El Chayo” abatido el 9 de marzo de 2014.
Tras la supuesta muerte de “El Chayo” en diciembre de 2010, Enrique “Kike” Plancarte, Servando Gómez Martínez, “La Tuta” asumieron el control del cártel; Sin embargo, en enero de 2011 “El Chango” Méndez quiso tomar las riendas de la Familia Michoacana, lo que ocasionó una ruptura interna entre los líderes de la organización criminal.
Con esta ruptura en marzo del mismo año surgen Los Caballeros Templarios, bajo el liderazgo de Enrique “Kike” Plancarte, abatido el 31 de marzo de 2014, Servando Gómez Martínez, “La Tuta” detenido este 27 de febrero del año en curso, Dionisio Loya Plancarte, alias “El Tío” detenido el 27 de enero de 2014 y José Antonio González "El Pepe" de quien no se tiene informes de su paradero u actividad.
La estructura templaría de lugartenientes, estaba conformada por Ignacio Andrade Rentería, alias “El Macho” o “El Cenizo”, Jorge Luis Valencia Arzate, “El Chuky”, Nicandro Barrera Medrano, “El Nica”; Héctor Gerardo Guzmán Mízquez, alias “El Güero Guzmán” y Genaro Orozco Flores, escolta y jefe de sicarios de la “Tuta”.
Para 2012 los Templarios se expandieron a 11 estados del país
A finales de 2011 la entonces Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) reportó que Los Caballeros Templarios, operaba solamente en Michoacán, Estado de México, Jalisco y Morelos.
Para 2012, reportes de la División Antidrogas de la Policía Federal, daban a conocer la expansión de la organización criminal en 11 estados del país modificando la radiografía del crimen organizado en México.
En la actualidad, las células de Los Caballeros Templarios han sido ubicadas en Michoacán, Estado de México, Jalisco, Baja California, Tamaulipas, Nayarit, Guanajuato, Colima, Querétaro, Chiapas y una parte de Hidalgo.
Los delitos más comunes que cometen los integrantes de esta organización criminal son: cobro de piso, secuestro, trasiego de estupefacientes, robo de autos, venta de armas, secuestro, extorsión a negocios ilegales y legales, extorsión a empresarios en todos los ramos, trata de personas; además de obtener cuotas fijas de funcionarios municipales.